Merlo // Hasta el momento, Los Pachuchos durante sus cinco años y medio de vida, han sido visto aproximadamente por diez mil quinientas personas. //
Escribe: Silvana Otreras Godoy* //
El musical infantil Los Pachuchos nació de un proyecto llamado “Caminemos Juntos” que fue presentado, en febrero de 2003, por la docente Lidia Simia y aprobado por el intendente del partido de Merlo, Raúl Alfredo Othacehé. Esta iniciativa consiste en llevar el teatro a las escuelas del distrito en razón de que muchos niños carecen de los medios para ver un espectáculo. “Actuamos en colegios humildes, para chicos que no tienen la posibilidad de estar en contacto con una obra y la respuesta es muy buena” aseveró uno de los actores, Nicolás Fernández.
A raíz de los incidentes del 2001, la profesora a cargo del taller de teatro para adultos sintió que tenía que hacer algo para no ver cómo la gente se mataba por comida; debido a eso buscó la manera de ayudar a las personas desde su área. A partir de allí surgió la idea de escribir dicho musical, por lo que les propuso a sus alumnos que lo hicieran. “Comprendí que debía enfocar mi tarea como docente para otro lado” afirmó Simia.
Los estudiantes se organizaron en grupos que se reunían, en diferentes casas, para llevar a delante el proyecto. Así comenzaron a salir sugerencias. En abril de 2003, el texto fue terminado entre varias personas; las letras de las canciones entre todo el alumnado de aquel entonces y; la musicalización de estas, entre cuatro jóvenes que estudiaban en el conservatorio de Morón.
Una vez finalizada la etapa de producción, se realizó un casting entre los estudiantes del segundo y tercer nivel del taller. Un año más tarde, se decidió convocar a los nuevos ingresantes del curso que tenían más cualidades para desenvolverse en el escenario, así también formaban parte del proyecto.
En el Teatro Municipal “Enrique Santos Discépolo” de Merlo se realizan los ensayos, bajo la dirección de Simia. Consiste en cursar dos horas una vez por semana, durante tres meses. La primera exposición frente al público fue el 16 de junio de 2003, en ese mismo teatro, ante trescientas cincuenta personas, aproximadamente, y luego de una semana comenzaron a presentarse en los colegios tanto privados como estatales del distrito. Esto incluye escuelas donde asisten chicos con capacidades diferentes.
“El público responde muy bien a la obra. Desde los niños chiquitos hasta los más grandes que van por que nos abrazan, nos besan, nos miran con inocencia e ilusión” aseguró Cecilia Giménez, estudiante del taller y protagonista del musical.
En cuanto a la dirección de Los Pachuchos, las marcaciones en cada uno de los ensayos previos a las presentaciones apuntan al dinamismo y al continuo desplazamiento escénico, sin dejar espacios en el escenario ni hacer baches silenciosos durante el transcurso del espectáculo, para que los espectadores estén permanentemente entretenidos. Además, los alumnos trabajan la dicción, el volumen, la vocalización, la articulación de la voz, las improvisaciones y los juegos teatrales ya que es una obra basada en la interacción constante con el público.
Para el traslado de esta, la docente debió armarse de lo que había en el teatro y de lo que se puede transportar, teniendo en cuenta que los quince animadores deben actuar en patios de cemento; en pisos de tierra y pasto; bajo el sol; en invierno, con ropa de verano y; utilizando como camarín baños y aulas de la dirección o de los chicos, que son muy pequeñas.
Finalmente, en lo que respecta a las presentaciones que se realizan en el Teatro Municipal “Enrique Santos Discépolo” - esquina Colón y Riobamba, partido de Merlo - la directora Lidia Simia efectúa reuniones previas con los sonidistas, el iluminador y el escenográfo para darles el libreto y sobre la base de ello, los especialistas elaboran toda la parte técnica que una puesta en escena requiere.
Ayuda económica
La profesora gestionó para que los estudiantes, a partir de 2007, cobren un biático de cincuenta pesos por mes, por actuar. Surgió a través de un comentario que le hizo al director de cultura, Miguel Ángel Vallejos, para ver si existía dicha posibilidad ya que los actores viajan desde distintos lugares como Marcos Paz, Ituzaingó, San Antonio de Padua o de zonas alejadas del centro de Merlo y muchas veces se trasladan en remís para llegar a horario.
La directora recibió una respuesta positiva e inmediata por parte del director, del subsecretario de cultura, Francisco Agnone, y del intendente del partido, Raúl Alfredo Othacehé. Además cuenta con la predisposición de los empleados del teatro como el encargado capilla, donde se guarda la escenografía, y el ceremonial que está a cargo del sonido y del micro que los transporta.
*La autora es alumna del Taller de Producción Gráfica II de
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